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jueves, 30 de mayo de 2013

El pensamiento de Nietzsche

Fue uno de los apasionantes filósofos de la historia, se lo llamó “El loco de Turín”, porque sus últimos años terminó enloqueciendo a raíz de una enfermedad que todavía no se supo, pero se cree que fue una sífilis mal curada. Era un filósofo loco que terminó volviéndose loco. Al igual que Marx tiene el mismo punto de partida que es la materialidad. Parte del concepto de vida, concepto que estaba faltando en la filosofía. La filosofía de Nietzsche se opone a la filosofía de Platón, quien dice que hay un mundo sensible y otro suprasensible. El mundo sensible es el que habitan los hombres y el mundo suprasensible es el mundo donde están las ideas perfectas en sí. Ellas son las ideas de la verdad, lo bello y lo bueno. En el mundo sensible está la imperfección del hombre, en cambio en el mundo suprasensible está la perfección de las ideas. Nietzsche lo que va a hacer es una transmutación de los valores, transvaloración de esos valores, saca esos valores del mundo de las ideas y los va a trasladar a lo que él denomina la materialidad de la vida. La vida es el concepto esencial en la filosofía de Nietzsche que tiene las siguientes características: “La vida es devenir, deviene porque la voluntad de poder es el eje dinámico de la vida”. La voluntad de poder apunta a representar, materializar a un tipo especial de hombre, que Nietzsche va a describir obsesivamente y que denomina “El transhombre, suprahombre o superhombre”. Lo va a definir como una cuerda tendida entre la bestia y el superhombre y bajo esa cuerda lo que hay es un abismo. Es decir, el hombre está en medio del superhombre y la bestia, el hombre es un camino hacia lo que el hombre debe ser, es decir: “El superhombre”.


A Nietzsche se lo define como aquel filósofo que piensa a martillazos, que piensa con ideas duras, frases duras. Por ejemplo, en el libro “El anticristo”, elige la guerra y no la paz, elige el odio en lugar del amor o cuando dice en una frase “no me importa que mueran los débiles, hay que ayudarlos a morir”. Para muchos autores, aquí está el inicio del pensamiento Nacional-socialista.


En su libro La genealogía de la moral, trata los valores morales y va a pensar totalmente distinto a los valores de la burguesía, a lo que él llama los lectores de periódicos, gente común que él odiaba,  que era incapaz de llegar a los extremos, incapaz de arriesgarse, incapaz de llegar a la locura, a lo dionisíaco. Ese hombre totalmente apolíneo, totalmente racional, diseñado por la sociedad burguesa que Nietzsche va a detestar. 
La palabra genealogía va a significar la búsqueda de los orígenes, es decir que Nietzsche va en búsqueda de los orígenes de la moral. Cómo nacieron las palabras que dan estructura al pensamiento moral de la sociedad burguesa del siglo XIX., va en búsqueda de las fuentes y cuenta que a los trece años se preguntó por el problema del mal? Y él se lo atribuye diciendo que el origen del mal está en Dios. Odia al cristianismo y a la moral cristiana, como lo manifiesta en su libro “El anticristo”. Lo que detesta es la blandura, la compasión, la piedad, el ascetismo, los valores sacerdotales. Él cree en los valores duros y los va a encontrar en los hombres duros, los guerreros, los aristócratas griegos. Nietzsche cree en otros valores basados en otros principios y los va a encontrar en el mundo sensible, sanguíneo, brutal, en el mundo de las “Aves de rapiña”, en el mundo de los guerreros. La palabra bueno existe porque los aristócratas griegos se dieron así mismo la capacidad de nombrarse los veraces. Los veraces son aquellos cuya palabra es la verdad. Cuando la aristocracia griega decía algo, esa era la verdad.


La aristocracia para Nietzsche no se trata de una clase social, sino se trata de una clase espiritual, de un elemento filosófico espiritual. La aristocracia es aquel estamento de la sociedad, con capacidad con alto espíritu, que es capaz de crear las verdades. De esta aristocracia griega es la que Nietzsche se siente heredero y de la que se permite pensar la genealogía de la moral.
Nietzsche crea el concepto del “Pathos de la distancia”, es decir, que se indignen de lo bajo, de lo plebeyo. Es la distancia que la aristocracia pone entre ella y lo plebeyo, lo vulgar. La aristocracia es capaz de dar nombre a las cosas por el solo hecho de crear las verdades. Esta clase espiritual, filosófica y ontológica que crea el SER, mantiene el pathos de la distancia frente a la burguesía vulgar de los lectores de periódicos del siglo XIX., para Nietzsche hay un surgimiento de una clase superior que tiene el derecho de reinar sobre las clases inferiores. Nietzsche se aleja de Dios, no piensa en Dios. Los valores de Nietzsche son valores carnales, vitales, del devenir de la vida, valores de la conquista, de la guerra, del coraje. La aristocracia va a ser el alma guerrera, va a ser el “Ave de rapiña”, la bestia rubia, el vikingo, que va a confluir en el Nazismo.



Nietzsche era un pensador solitario, un hombre enfermo que tenía una relación muy conflictiva con su madre y su hermana. Pero su pensamiento se sitúa en un momento histórico, nació en una coyuntura histórica que lo determinó. La historia en la que surge Nietzsche, es una historia muy compleja en la que surge la unidad alemana en el Siglo XIX. La tardía unidad alemana, determina las dos guerras mundiales del siglo XX. Alemania es una de las últimas naciones europeas que realiza su unidad. La realiza con el canciller Bismark y el Kaisser Guillermo, la consolida con la guerra Franco-prusiana de 1871, donde Prusia gana la guerra y desde Prusia se gesta la unidad alemana. Llega Alemania tarde a su unidad nacional, con lo cual todos los territorios habían sido conquistados por los otros imperialismos y tiene que rediscutir la organización que tiene el mundo declarando la guerra para ampliar su territorio. Alemania necesito de una voluntad guerrera, una voluntad de poder. Nietzsche fue el filósofo de la unidad alemana a través del concepto de voluntad de poder, que Alemania tiene que instrumentar para rediscutir el reparto imperialista del mundo.


La vida en Nietzsche, tiene dos valores conservación y aumento. Hay vida porque tiende a conservarse, conservándose va a poder aumentar. Pero si solo se conserva la vida va a morir, solo aquello que nos hace tener más vida nos permite conservar lo que tenemos. voluntad de poder. Hay un devenir de la vida porque hay voluntad de poder.
Este espacio vital de conservación y aumento va a ser para Nietzsche la
La voluntad de poder conquista, obtiene, domina y lo que tiene se tiene que conservar, la voluntad de poder tiene que quererse a sí misma, es un impulso vital a sí mismo que se quiere por sobre todas las otras cosas y luego advierte que todo aquello que conquista lo tiene que conservar, pero para poder conservar tiene que seguir conquistando. Es un ir más allá constante. La voluntad de poder es un intencional, se arroja hacia el mundo y conquista.


Estados Unidos en Irak es voluntad de poder, sabe que si solo conserva lo que tiene se hunde, desaparece. Para conservar lo que tiene el imperio bélico comunicacional, tiene que seguir invadiendo para aumentar su poder. La dinámica del poder es no detenerse nunca.
Hitler encarna la voluntad de poder Nietzscheana, en el concepto de espacio vital. Hitler va a decir yo soy Alemania y si no me dan el espacio vital que necesito, lo voy a conquistar, necesita expandir lo que tiene, porque sino Alemania va a morir.
Nietzsche  toma  la frase “Dios ha muerto”, del  libro  La Gaya ciencia  y  significa  que todos  los  valores  suprasensibles,  todos  los valores  que  tenían que ver con la imagen de Dios, en tanto instancia suprema por sobre el hombre. Dios  es  todo   fundamento  que lo acepte.  Si  una  persona  acepta   que   Dios existe, puede no pensar más. Dios piensa por él, sufre por él, se angustia por él, va a morir por él.

Nietzsche va a decir “Dios ha muerto”, porque su filosofía va a tener el fundamento de la vida, porque la vida es devenir, es potencia y la verdad es aquello que la voluntad de poder conquista.


Nietzsche va a decir otra frase: “No hay hechos, hay interpretaciones”, si no hay hechos y solo hay interpretaciones, ¿dónde está la Verdad?...
La verdad es una conquista de la voluntad de poder. Hay muchas verdades. En una noticia, cada medio (diario, radio o TV) va a contar ese hecho de manera diferente, entonces va a haber varias interpretaciones y la verdad es la que la voluntad de poder logra imponer. Hay una relación entre verdad y poder. La verdad es una creación del poder, la verdad surge del poder. La verdad es la colisión de las verdades, guerrean entre ellas, pero la que triunfa es la que está respaldada por la mayor fuente de poder que la emite. Concibe a la verdad como una lucha, como una expresión poderosa de esa voluntad que necesita aumentar constantemente para conservarse y para conquistar tiene que establecer sus verdades como la única verdad. Llama “Nihilismo” a ese poder que tuvo el pensamiento platónico de las ideas perfectas o el pensamiento religioso sobre la vida. Nietzsche le reprocha a ese pensamiento suprasensible de ideas perfectas que ha nihilizado la vida; entonces él nihiliza a Dios, es decir negar a Dios.


En su primer libro se llamó “El origen de la tragedia”, con su concepción de la historia rompe con el optimismo Hegeliano o del Marximo. Para Nietzsche la historia es caótica. La historia son verdades que colisionan las unas contra las otras. La historia es la lucha por imponer mi poder al otro, entonces mi poder va a imponer una verdad al otro.
Toda esta idea sobre la verdad, el poder y la historia, es lo que Nietzsche va a llamar el “Dionisismo”, que está basado en el culto de Dioniso. Es un culto griego basado en la esplendidez de la embriaguez. Son las fiestas dionisiacas que después devienen en las fiestas báquicas de los Romanos, en el cual cada miembro se entrega a la embriaguez.


Nietzsche tiene una concepción dionisíaca de la historia. Lo que él ve en la historia no es la racionalidad de Apolo, que era otro de los dioses de los griegos. Ellos tenían a dos dioses uno era Dioniso o Dionisio (Los instintos) y otro era Apolo (la razón). Dioniso era el dios de la embriaguez donde el yo se pierde en las fiestas dionisiacas. Es la perdida de la individualidad y donde perdemos la individualidad estamos muy cerca de la locura. Esta era la concepción que tenía sobre la historia dionisiana, barbárica, conquistadora.


Lo apolíneo es lo claro y distinto cartesiano, es la razón, la racionalidad, el control. Un ser apolíneo no pierde su individualidad  ni se embriaga para perder su centralidad, su centro, su individualidad, nunca va a perder su Yo.
El Dionisimo, pierde el centro del Yo. Nietzsche es anticartesiano, reniega de la centralidad del ego.
El pensamiento de Nietzsche es muy diferente al hombre racional cartesiano, del sujeto constituyente Kantiano y del sujeto absoluto Hegeliano, es instinto, dionisismo y locura.
Era un filósofo que exalta los instintos, se entrega a los instintos que es la verdad. La razón  de occidente vino a cercenar al hombre.

Freud continuó desarrollando el pensamiento de Nietzsche, en cuanto a la exaltación de lo instintivo, en la cual el hombre accede a través de la festividad dionisiaca y la embriaguez. El hombre que se libera de todas las ataduras que la sociedad le ha puesto. La sociedad ha maniatado a los individuos para permitirles vivir en ella.
Antes del surgimiento del Estado Moderno (El Leviatan, de Tomás Hobbes), los hombres vivían en un estado de guerra permanente, “El hombre es el lobo del hombre”. Como el hombre sabe que es el lobo del hombre le entrega al Estado, su voluntad. El contrato social consiste en que para evitar el estado de guerra contra todos, le otorgan al Estado la decisión sobre todos. Se establece el contrato entre el Estado y sus miembros. El estado burgués que Hobbes delinea surge maniatando, oprimiendo  a los hombres para que no se maten entre ellos.
El libro mas filosófico de Freud, fue “El malestar en la cultura”, y dice que la cultura humana para poder realizarse tiene que reprimir los instintos primarios, primitivos, esenciales del hombre. Los instintos humanos naturales tienen que ser oprimidos, sofocados para crear la cultura.
Freud va a decir que la cultura vive en perpetuo malestar, porque la condición de posibilidad de que exista una cultura es que los hombres atan sus instintos. El hombre de la cultura tiene sujetado al dionisismo Nietzscheano. La cultura es la represión para que los hombres puedan realizarse en sociedad y el principal instinto que el hombre de la cultura reprime es el instinto sexual. Y la represión de estos instintos sexuales fundamentales del hombre le genera neurosis. “El hombre de la cultura es un neurótico”.



Marx, Nietzsche y Freud, son los que más van a cuestionar ese “Cógito ergo sum” cartesiano. Freud va a decir que la cultura burguesa, la razón cartesiana, sofoca los instintos más vitales del ser humano y los somete al malestar de la cultura.
Freud va a definir al hombre como un “Dios con prótesis”. La técnica humana es un dios con prótesis. Los instrumentos científicos y técnicos que sirven para devastar la naturaleza y explotar a los hombres. Encuentra en el hombre dos elementos fundamentales que son el eros (la fuerza del amor) y la pulsión de muerte (la fuerza de la destrucción). Estas dos pulsiones que están en el hombre se enfrentan constantemente. Las pulsiones instintivas son más poderosas que las racionales y ve al mundo dominado por la pulsión de muerte.
Nietzsche y Freud fueron los que más castigaron la racionalidad en la historia.
La Escuela de Frankfurt, viene a repensar todos estos problemas desde una perspectiva trágica. Max Horkheimer y Teodor Adorno, en su libro “Dialéctica del Iluminismo”, tiene una profunda incidencia Nietzscheana o Freudiana, donde interpreta la Odisea de Homero, donde el hombre se hace atar para que la cultura sea posible y seguir siendo un animal racional. Esta parábola de Odiseo, le sirve a Adorno y Horkheimer para demostrar que la razón humana esclaviza a los hombres. Esa razón que surge con Descartes que se consolida en la época de las luces, del iluminismo, de la diosa razón del capitalismo, tiene una dialéctica y es lo que dice Nietzsche y Freud, encadena a los hombres, aniquila sus instintos y los somete a las reglas de la razón capitalista burguesa. Esta razón tan despiadada lleva a los campos de exterminio nazi, que explicitan la racionalidad de la muerte. “Si existe Auschwits no existe Dios”.


Adorno Y Horkheimer van a llamar razón instrumental a la razón del iluminismo, que nace con la revolución francesa y termina en Auschwits, en los campos de exterminio.





domingo, 19 de mayo de 2013

La razón como instrumento del poder


Adorno y Horkheimer, escribieron un libro que se llama “Dialéctica del iluminismo”, el núcleo del problema que plantean, es cómo,  después de esa esperanza en el iluminismo que la Revolución Francesa con pensadores como Voltaire, Diderot, D´alembert, Rousseau, Kant, que confían en la razón humana, en el gran relato del racionalismo, de la razón humana que dice que el hombre por medio de su razón va a alcanzar la plenitud, va a alcanzar la felicidad, que va a tener una sociedad bien organizada, civilizada, en progreso científico que va a curar todas las enfermedades y nos va a llevar a la felicidad del hombre. ¿Cómo es posible que la humanidad haya llegado a los campos de concentración de Auschwitz, a una forma extrema de barbarie? ¿Cómo pudo haber ocurrido esa barbarie en Europa, centro de la civilización humana?



Adorno y Horkheimer siguen un texto escrito de Walter Benjamin, que se llama “Las tesis de la Filosofía de la historia”, que influyó en el libro sobre la “dialéctica del iluminismo. El iluminismo, el pensamiento racional comienza su despegue con la Revolución Francesa, cuya finalidad era la racionalidad en la historia, sin barbarie. Idea que tenía el colonialismo cuando se expande por sus colonias y era de llevar la civilización, el progreso, la razón, el derecho. Es decir que el imperialismo del siglo XIX, identifica su expansión con la expansión del progreso, de la burguesía capitalista que se erige como la divinidad, la diosa razón que viene a resolver todos los problemas de la humanidad.



La filosofía positivista, de Augusto Comte, dice que estos son los hechos que obedecen a un orden racional, donde triunfa la civilización, el mundo de las ideas, el progreso entra en Las Colonias, tal como quería nuestra generación del 80, Sarmiento, Roca, Mitre.

Pero este culto a la racionalidad ha provocado un monstruo. Las atrocidades más grandes de la historia provocado por la razón humana y este hecho va a ser Auschwitz.


La historia cuenta que lo sucedido en Alemania con el Nazismo fue un hecho irracional, sin embargo, fue un hecho ocasionado por la razón humana. Hitler utilizó lo que Adorno y Horkheimer llaman “La razón Instrumental”, es decir instrumentos para dominar a los hombres. 




Hannah Arendt, escribe un ensayo que se llama “Eichmann en Jerusalém” y hace referencia a la banalidad del mal, que es el mal burocrático, racional. En la película Garage Olimpo, se vio que cuando los torturadores entraban a la Esma, marcaban tarjeta. Es decir que los torturadores realizaban un trabajo burocrático, como cualquier trabajo burocrático, la tortura es un trabajo. Para Eichmann el mal era banal, no tenía importancia, Él solo cumplía con su trabajo de torturar o matar en el campo de concentración. El único problema era que tenían que hacer desaparecer el cuerpo, lo demás era solo un trabajo.


Auschwitz es consecuencia de la racionalidad alemana que necesitaba expandir su territorio y necesita la exaltación el pueblo alemán, señalando a los judíos como los enemigos del pueblo y se los comienza a perseguir porque piensan que los Judíos van a terminar con Alemania. El racismo alemán tiene una característica singular, no desprecia al judío por ser inferior, sino por considerarlo superior, más inteligentes que los alemanes y sienten el peligro quelos judíos se van a quedar con Alemania, van a manejar las finanzas, el erario público; entonces hay que exterminarlo porque son muy inteligentes. Este era  el razonamiento de un Nazi  que aplica un esquema racionalmente eficaz.

Foucault va a decir que la razón de la burguesía capitalista necesita afirmarse negando a la locura y a la delincuencia, por eso construye cárceles y manicomios. El hombre no es malo cuando es irracional, es malo cuando es racional. El uso que le ha dado el hombre es más que la simple razón, es la razón utilizada para esclavizar, dominar a los hombres y someter a la depredación de la naturaleza.
Esta racionalidad burguesa, que como razón instrumental domina a los hombres lleva su instrumentalidad a los campos de exterminio de Auschwitz, donde son racionalmente exterminados 6 millones de judíos, gitanos, negros, homosexuales.




La razón instrumental va a arrasar a la naturaleza, la vuelve un arma de guerra, un arma de consumo, como ocurre con el imperio norteamericano, que para proteger a su país, invade Afganistan, Irak, es decir la razón instrumental es puesta al servicio del poder bélico norteamericano para matar, torturar. Está claro que la razón y el poder van de la mano y de paso arrasan con todo el petróleo de Oriente.


Walter Benjamin, va a decir que no hay hechos racionales en la historia, no hay una dialéctica de Hegel, sino que ve en la historia un paisaje de ruinas, no hay dialéctica hay ruinas y entrega una concepción de la historia como catástrofe, que marca el fracaso de la razón humana. 






miércoles, 15 de mayo de 2013

Foucault: Su pensamiento, su crítica a la razón y análisis del poder


Michel Foucault es uno los grandes filósofos del pensamiento moderno, es un estructuralista. En su libro: “Las palabras y las cosas”, tomando como base el pensamiento de Nietzsche, dice “el hombre ha muerto”; y de Heidegger, a través de la lectura que éste hace de Nietzsche. La muerte del hombre es paralela a la muerte de Dios de Nietzsche“Si ha muerto Dios, entonces ahora muere el Hombre”… Tanto Foulcault como el estructuralismo, lo que hacen es salir del sujeto. 
Ese sujeto que Descartes en 1637, pone en la centralidad, como punto de partida epistemológico único el “Ego cógito, ergo sum”,  “pienso, luego existo”. Ese sujeto centralizado que domina todo el conocimiento y toda la realidad va a ser cuestionado por Nietzsche y Heidegger, van a decir el sujeto no está en el centro ni domina la realidad. El sujeto por el contrario pertenece a lo que Foulcault va a llamar la Trama Histórica, pero no es un sujeto constituyente de la realidad, sino que es un sujeto constituido por las relaciones de la estructura. Foulcault saca al sujeto de la centralidad en la que lo había puesto Descartes para ponerlo dentro de la estructura.

Tanto Sartre  como  Foucault,  siguen el pensamiento de Heidegger, haciendo una fuerte crítica a Descartes. Heidegger, en sus dos tomos escritos sobre  Nietzsche,  dice que Descartes hace una antropología,  un estudio  del  hombre. Ese  hombre puesto en la centralidad, es el hombre  que  olvida  al  ser y se dedica  a  la  conquista  de los entes.

Estos filósofos franceses al ver que el marxismo se derrumbaba, veían la caída de la URSS, con lo cual el marxismo no era una herramienta útil para conocer la realidad; entonces necesitan una crítica a la modernidad capitalista no proveniente de Marx y la encuentran en Heidegger que es uno de los más grandes críticos de la modernidad capitalista en tanto técnica apropiadora de los entes, de los objetos de la realidad (cosas). Lo toman a Heidegger, pero tienen que adaptarse él, porque termina con el sujeto, va a decir que esta apropiación que hace del ente antropológico, de la realidad, es apropiada por la técnica del sujeto.
Heidegger va a matar al sujeto porque va a decir que el sujeto no es el que constituye la realidad, sino que la realidad es apropiada por la técnica del sujeto.

Heiddeger y Foucault terminan con el sujeto epistémologico y lo que va a poner en el centro es la estructura y el sujeto va a quedar adentro de esa estructura. Para salir de Heidegger, Foulcault pone al sujeto dentro de la estructura y lo somete a infinidad de determinaciones.



El libro "las palabras y las cosas". Donde Foucault dice que el “Hombre a muerto”, se publica en el año 1966, pero en 1968 se produce el mayo francés, entonces si el hombre ha muerto no se podría haber producido el mayo francés. La crítica que se le hace al estructuralismo es que las estructuras no bajan a la calle, son los hombres los que salen a la calle. 
Aquí aparece el reconocimiento a Sartre, filósofo comprometido con las luchas sociales. Aparece en escena el sujeto libre que con su praxis hace la historia. Tampoco este libro fue muy difundido en Latinoamérica donde estaba en pleno auge la Revolución cubana y el Che Guevara, con la figura del hombre nuevo que daba la vida por la revolución.
Vigilar y castigar, fue el libro de Foucault que más difusión tuvo, del que tuve el honor de leer, en mi época de estudiante de derecho. Un libro que habla de las prisiones, donde hace un análisis exhaustivo de “Las sociedades disciplinarias”, donde hace un análisis del poder. “donde hay poder hay resistencia al poder”, aunque nunca habló sobre cómo se resiste al poder. Para Foulcault, el poder va a ser el poder de la razón. 

También Adorno y Horkheimer, en su libro “Dialéctica del iluminismo”, hacen una crítica a la razón instrumental, que venía del iluminismo como “Diosa razón”, utilizada como herramienta para depredar el planeta y explotar a los hombres, cuya máxima expresión fue el genocidio judío.
Entonces Foucault, va a realizar su crítica a la razón a través de este libro Vigilar y castigar” y otro libro que se llama “Historia de la locura en la época clásica”.   

La finalidad de este libro es erosionar a la razón, sacarla del lugar privilegiado que tiene, cuestionarla, mostrar que esa razón ha sido instaurada para dominar a los hombres. En este libro ataca a la razón desde la locura, no hay nada más que cuestione a la razón como la locura, por eso la razón humana debe de ocultar a la locura. La locura es la antítesis de la razón, es la negación de la razón, no puede admitir que parte de la razón es la locura. Incluso en este mundo racional es el principal generador de locura, por eso el manicomio ocupa un lugar principal, se convierte en el lugar donde la sociedad racional encierra a los locos y los aparta del resto de la sociedad.
Con el encierro de los locos, deja en evidencia, que la sociedad disciplinaria, la sociedad racional, es una herramienta para dominar a los hombres y para dominar a los hombres la razón debe de apartar a la locura, el manicomio cobra importancia porque aparta aquello que es diferente es fundamental para la razón. La locura es el mayor cuestionamiento a la razón.

En Vigilar y castigar, Foucault analiza la delincuencia, la sociedad civil debe de ser transparente, organizada, un lugar donde todos podamos vivir y ese lugar es el Estado del que hablaba Tomás Hobbes, todos debemos ceder parte de nuestra libertad al Estado para organizar a la sociedad. Foucault va decir que para que la sociedad pueda organizarse, necesita las cárceles para encerrar a los delincuentes, como a los locos se los encierra en el manicomio. El elemento esencial de la cárcel es el sistema panóptico de Jeremy Bentham. El panóptico era un diseño de cárcel, con una torre central, donde un solo guardia puede ver a todos los presos sin ser visto, además todos se ven a todos. El que ve cosifica al otro, convierte al otro en un objeto al ser visto, lo deshumaniza, el preso es una cosa a controlar, a vigilar sin ser visto.
La relación que establece el poder con el detenido o el loco, es una relación de exclusión. El poder es la razón que observa, que controla, que domina, que instrumenta a los hombres, que desarrolla las ciencias humanas para conocer al hombre y dominarlo. El poder tiene el poder de imponer la verdad. El poder que tienen los medios de comunicación, le permite moldear las conciencias de los sujetos de una sociedad, convierte a las personas en un enorme mundo de receptores de la verdad que emite ese poder comunicacional. El poder es el que crea la verdad, aunque la verdad absoluta no exista, lo que existe es la interpretación de la verdad, la verdad que ese poder comunicacional repite constantemente hasta que los oyentes terminan creyéndose.

Friederic Nietzsche dice: “No hay hechos, hay interpretaciones”, con lo cual cada persona puede interpretar un hecho, pero el poder tiene el poderío de imponer la suya. El poder es la capacidad que tiene un determinado grupo de imponer su verdad como verdad para todos. El poder lo hace teniendo la mayor cantidad de medios de comunicar para imponer la verdad de ese poder para dominar o ganar más dinero.




Si existe alguna similitud con la realidad de lo que ocurre en el país, es pura casualidad.




Uno de los conceptos más importantes de Foucault, fue el concepto de poder pastoral, es decir del pastor, el poder del hombre, el pastor es el dueño de la manada y guía a la manada.
¿Por qué lo llama poder pastoral? Porque el poder de la iglesia católica como Estado-Institución, requiere de sus pecadores que confiesen sus pecados al cura, es lo que se llama la confesión. 
Aquí aparece un poder que el cura tiene sobre el pecador, porque el cura conoce los pecados del pecador y el pecador no conoce los pecados del cura. El cura es el poder eclesiástico o pastoral que controla a los hombres a través del temor a Dios y de la confesión. La confesión se produce porque le temo a Dios por mis pecados. Con esto se instaura el poder del sacerdote sobre las personas.


Se extiende durante el largo período de la edad media y que es el gran poder controlador de la iglesia contra los hombres, se da en el Estado Moderno, quien empieza a ejercer el poder pastoral; por ejemplo: cuando alguien va al médico le confiesa todo y le responde todas las preguntas, le va a contar todos sus problemas físicos, de Salud. 
Pero ahí se va a generar una situación de desigualdad, la medicina se instaura como un poder por sobre el paciente. Lo mismo ocurre entre el psiquiatra y el loco, el psiquiatra se arroga el poder de la razón y lo va a controlar. La relación entre el policía y el delincuente, el policía es la ley del Estado que priva de la libertad a esa persona, porque supone que violo la ley. En la escuela ocurre lo mismo, el profesor va a transmitir conocimientos y esos van a ser verdaderos para el alumno, le va a enseñar lo que está en los libros que dicen la verdad del poder a lo largo de la historia. El maestro es el pastor de sus alumnos, transmite la ideología del poder y se transgrede se convierte en subversión ideológica porque la historia es una sola y es la que cuenta el maestro en la clase.


Foulcault denomina “Instituciones de secuestro” a aquellas instituciones donde se apartan a todas aquellas personas que no están dentro del sistema productivo capitalista (la fabrica). Entonces, se manda a los niños a la escuela para que se acostumbre a estar en un lugar cerrado varias horas y aprenda a ser un trabajador obediente cuando sea grande. El manicomio  es la institución para cerrar a los locos que no se adaptan. Los hospitales para depositar a los enfermos, Los asilos de ancianos para los viejos que ya no sirven para producir y las cárceles para los delincuentes que transgreden las leyes impuesta por el sistema.


Para Foucault, en la historia no hay una linealidad, sino discontinuidad. Se opone al historicismo de Hegel, que tenía un desarrollo dialéctico interno y necesario. Este desarrollo era el que el sujeto iba tomando conciencia de sí hasta llegar a la autoconciencia total, que tiene una continuidad sustancial, la sustancia que constituye la historia del sujeto absoluto. Marx toma la dialéctica hegeliana, hace una metafísica de la historia, va a decir: que “la historia es dialéctica”, tiene una linealidad que no se detiene, es decir que hay una afirmación, una negación, otra negación de la negación y una afirmación que contiene a los contrarios anteriores. De la negación que hace la burguesía, nace el proletariado, del triunfo de la burguesía surge el proletariado y aniquila a la burguesía, estableciendo una sociedad sin clases, no habrá explotación del hombre por el hombre. Hay en la metafísica de Marx un ordenamiento de los hechos históricos.




Aparece Foucault criticando a Marx, diciendo que la historia no tiene un devenir necesario ni lineal, la historia es una
discontinuidad permanente. No hace una metafísica de la historia porque se basa en Nietzsche,en su libro “La segunda consideración intempestiva”, donde hace una crítica a la historia lineal.


La verdad para Foucault es múltiple, no hay una sola verdad, hay choques de verdades de conocimientos. Dentro de la estructura de la que él habla no hay sujetos, hay luchas, colisiones, conflictos, hay enfrentamiento de distintas verdades sobre los hechos históricos. En este dominio de la verdad, lo que analiza es el poder que impone la verdad. La lucha que se da es por imponer su verdad como la verdad y esa va a ser la verdad impuesta por el poder. Esta concepción es una concepción caótica de la historia. Foucault anticipa a los postmodernos esta multiplicidad de hechos de la historia, que toma de Nietzsche.
La fórmula que establece para la rebelión del poder: “donde hay poder, hay resistencia al poder”, va a ser respondida a fines de los años 70 y el concepto que va a elaborar es el de contraconducta: “a la conducta del poder, hay contraconducta de los sometidos al poder”.